Esta crisis era impredecible pero, ¿estaba el sector preparado?
Veníamos de unos años muy buenos, por lo que el grueso de la hotelería española estaba saneada después de superar la anterior crisis. Nos hemos convertido en referentes absolutos en las categorías de 3 y 4 estrellas en Europa, sin duda, y esto ayuda a que hayamos sido capaces de haber parado el golpe momentáneamente. Por hacer un símil, es como si el sector turístico fuera un enfermo al que han puesto una vía que son los ERTES, en el otro brazo la vía de los ICOS y un respirador que son rebajas de IBI, impuestos de la basura, etcétera. El enfermo se mantiene con vida, pero no puede aguantar mucho tiempo en esta situación. Hay que encontrar el tratamiento para curarle cuanto antes. Pero una vez curado, el enfermo no es capaz de salir a correr y hacer vida normal. En este caso, el proceso de recuperación creo que va a ser muy lento, especialmente si hablamos de turismo business travel y MICE (Meetings, Incentives, Conventions and Exhibitions)
Los clientes han cambiado su mentalidad acerca de los viajes. Ahora tienen muchísima información y son más temerosos a hacer viajes largos. La tendencia es hacer desplazamientos de poca distancia, en vehículo propio siempre que sea posible, y a destino de playa y montaña donde no haya aglomeraciones y se ofrezcan garantías sanitarias.
Pero actualmente hay destinos como el Caribe, República Dominicana o Riviera Maya que tienen una ocupación alta. ¿Pasará lo mismo en Europa?
Creo que no es tanto una cuestión de destino o de distancia, porque en un avión el aire se renueva constantemente y, en ese aspecto, es un medio de transporte seguro. Lo que va a cambiar es el tipo y el motivo del viaje, por eso creo que el MICE (congresos, ferias, convenciones, etcétera) va a ser lo que más tardemos en recuperar. Con el teletrabajo hemos reducido al máximo los viajes y no es fácil convencer a las empresas de que es necesario viajar y hacer reuniones presenciales. Creo que los temas importantes se solucionan mejor cara a cara. Hay que verse y mirarse a los ojos.
La Mesa de Turismo y otras organizaciones del sector nos hemos fijado el 1 de abril que el 30% de los europeos estarán vacunados. No será con las cifras de 2019, pero ahí deberíamos poner en marcha con fuerza la recuperación del sector, potenciando nuestra marca España. Una marca que, por cierto, es más apreciada en el exterior que en el interior de nuestro país. Ahí influye un desorden político que no nos beneficia nada. Como se dijo en el World Economic Forum, España es el país más competitivo del mundo, por su clima, comunicaciones, playas, gastronomía y, también, su sanidad.
¿Cuáles son las claves para la recuperación?
Las claves de la recuperación son talento, digitalización, formación y aplicación de nuevas tecnologías en todos los ámbitos. Ya transformamos al sector hace escasamente 16 años cuando fundamos el Instituto Tecnológico Hotelero y lanzamos el programa “Ningún hotel sin web”. Por entonces apenas un 11% de los hoteles contaban con una web operativa y, los que la tenían, era a nivel meramente informativo con fotografías y descriptivos de sus servicios.
Hemos avanzado mucho en estos años, pero aún queda mucho por hacer. Viene una época de cambio total de mentalidad y hay que hacer apostolado interno en el sector. El modelo de inteligencia de mercados, digitalización y destinos inteligentes va a ser la base del nuevo turismo. El cliente va a valorar aspectos muy diferentes, como he dicho antes.
¿Ves consolidación en el sector hotelero?
Totalmente. No tanto consolidación desde el punto de vista de propiedad, sino de marca, de franquicia y de producto.
Sobre las agencias de viajes tradicionales y las plataformas como Booking o Edreams. ¿las ves condenadas a fusionarse?
Los grandes touroperadores que se han ido fusionando van a quedar consolidados en grupos muy homogéneos donde habrá unión de agencia, avión y hotel. Este tipo de paquetes gusta mucho especialmente a los clientes anglosajones por la seguridad que les da tenerlo todo contratado en el mismo sitio. Las plataformas digitales cada vez serán más activas y habrá mucha competencia de precio, lo que provocará la desaparición de las comisiones elevadas por intermediación.
Por la estructura de las ayudas de la SEPI ¿cómo ves que el Estado sea socio de grandes operadores turísticos?
Es fundamental controlar el hub de Madrid como entrada de todos los países latinoamericanos. Es imprescindible que el Gobierno haga lo que sea necesario para que esto pase, y me refiero a la fusión entre Iberia y Air Europa. El hub de Madrid es fundamental para el desarrollo turístico de España y controlar la entrada a España de millones de latinoamericanos. Igual que desde el hub de Londres se controla la entrada de norteamericanos y desde Frankfurt, Estambul y parte de Italia se controla la de Asia. Es necesario estar en el tablero porque el valor estratégico es altísimo.
En el caso de las ayudas a las empresas familiares hoteleras ¿cómo ves que al ser en forma de entrada en el capital.
El sector hotelero es muy joven, 50 o 60 años, y aún no hay una cultura de fusión o de unión empresarial para ser más fuertes, en términos generales. Esta crisis de 2020 va a hacer cambiar muchas mentalidades, hay que superar las vanidades personales y preveo que en pocos años hay que hacer grandes concentraciones para competir en el entorno cambiante que tenemos ahora.
Entrevista extraído del número 11 de la revista DeLawIt. ¡Consigue el ejemplar completo!