Plan de Recuperación Europeo
El Consejo de Ministros ha aprobado a propuesta del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO) el Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica (PERTE) de Energías Renovables, Hidrógeno Renovable y Almacenamiento (ERHA).
La finalidad de este PERTE es desarrollar tecnología, conocimiento, capacidades industriales y nuevos modelos de negocio que refuercen la posición de liderazgo de España en el ámbito de las energías limpias.
España es una potencia mundial en renovables. Cuenta con el mayor recurso solar de Europa y también destaca por su recurso eólico. El país dispone de una poderosa cadena de valor industrial en la tecnología fotovoltaica –produce el 60% de los componentes– y en la eólica, que fabrica el 90% de los equipos y es el tercer país de la UE en I+D. También lidera la integración de la generación renovable en el sistema eléctrico.
Todas estas capacidades sitúan a España en una posición clave para el desarrollo de energías renovables con un alto componente innovador, como el hidrógeno renovable o el almacenamiento o las tecnologías marinas flotantes, que serán fundamentales en el proceso de descarbonización, y que aportarán riqueza y empleo de calidad, sostenible a largo plazo.
Es en este contexto en el que se diseña el PERTE ERHA, con la finalidad de posicionar España como referente tecnológico, desarrollar y desplegar tecnologías, consolidar las cadenas de valor de las energías renovables e impulsar la innovación social y de modelos de negocio y su integración en los distintos sectores productivos.
El PERTE ERHA es una de las herramientas destacadas del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR) y está vinculado a los Componentes 7, 8, 9, 10 y 17, dedicados a las renovables innovadoras; al almacenamiento, la flexibilidad y los nuevos modelos de gestión inteligente de la energía; al hidrógeno renovable; a la Estrategia de Transición Justa; y a los planes complementarios de I+D+i, respectivamente.
Este ámbito troncal incluye 25 medidas transformadoras, con un presupuesto público del MITECO de 3.558 millones de euros.
Además, el PERTE ERHA incorpora elementos transversales del PRTR, como la formación o la inversión directa, con 17 medidas facilitadoras sobre transición energética; movilidad con gases renovables; capacitación, formación profesional y empleo; y ámbito tecnológico y digital, con una dotación económica pública de 3.362 millones, que permitirán captar otros 4.060 millones de capital privado.
El PERTE ERHA contiene un marco de seguimiento de proyectos integrales en transición energética denominado Energía NextGen, un sistema de clasificación, seguimiento y etiquetado para proyectos integrales que combinen distintas actuaciones e instrumentos del Plan de Recuperación, que les aportará visibilidad para clientes y proyectos nacionales e internacionales.
Con carácter general, el apoyo económico del PERTE ERHA se otorgará mediante convocatorias de concurrencia competitiva para seleccionar los mejores proyectos. Las convocatorias compartirán unos criterios de selección comunes que tendrán en cuenta la participación de Pymes, el impacto sobre la cohesión territorial o la transición justa, la creación de empleo o la innovación. Tendrá prioridad la inversión a corto plazo que sea compatible con la consecución de las metas fijadas a medio y largo plazo.
El grueso de las líneas de ayuda y actuaciones de apoyo del PERTE ERHA estarán disponibles entre 2022 y 2023, y los proyectos beneficiarios se ejecutarán hasta 2026. Algunos de los programas ya están en marcha: acaban de superar la fase de información pública cuatro convocatorias dotadas con más de 500 millones en conjunto para el impulso a la cadena de valor del hidrógeno renovable, proyectos pioneros de hidrógeno renovable, proyectos de I+D en almacenamiento energético y proyectos piloto para comunidades energéticas.
El hidrógeno es un vector energético clave para alcanzar un futuro energético limpio, seguro y asequible, porque permite descarbonizar sectores donde es complejo introducir soluciones sostenibles, como el transporte pesado, la siderurgia, el cemento, o la industria química, entre otras. España ya cuenta con una hoja de ruta del hidrógeno renovable que establece, entre otros, el objetivo de alcanzar 4 GW de capacidad de producción en 2030, un 10% del total de la UE.
La cantidad y la calidad de los recursos renovables le otorgan a España una ventaja competitiva para impulsar el desarrollo del hidrógeno renovable, que le permitirán convertirse en un hub internacional de la tecnología. Por este motivo, se trata del elemento del PERTE que recibe más apoyo: 1.555 millones de euros.
Las inversiones previstas en el Componente 9 del PRTR, titulado “Hoja de ruta del hidrógeno renovable y su integración sectorial”, se articulan en torno a cuatro líneas que abarcan desde la fase de la innovación y el desarrollo hasta su implantación comercial:
Así, el PERTE ERHA promoverá activamente la participación de pymes globales especializadas en centros tecnológicos y laboratorios, así como el desarrollo de centros de excelencia y la formación y capacitación profesional. También subvencionará las aplicaciones en el transporte pesado –de embarcaciones a ferrocarriles, camiones y autobuses– y los proyectos de electrolizadores de gran escala, relacionados con usos industriales locales y aplicaciones comerciales.
El Componente 7 del PRTR, “Despliegue e integración de energías renovables”, tiene como finalidad impulsar de manera integral la cadena de valor y de conocimiento de las energías renovables, contemplando todo su ciclo de vida, con especial atención a las energías marinas. La cuantía de las ayudas destinadas a este capítulo asciende a 765 millones de euros.
En líneas generales, el apoyo recalará en los proyectos singulares y de innovación, y el refuerzo de la capacidad de fabricación de equipos y componentes asociados a las renovables. También en la sustitución de aerogeneradores antiguos por máquinas nuevas –vinculado al reciclado y el tratamiento de los equipos retirados– y en el desarrollo del biogás a partir de cualquier actividad agropecuaria o de valorización de residuos, así como su conversión a biometano.
Para desplegar las renovables en las aguas continentales, en consonancia con la Hoja de Ruta para el desarrollo de la eólica marina y de las energías del mar, el PERTE ERHA financiará a fondo perdido las plataformas de ensayo –España es el país de la UE con más instalaciones de I+D de la UE para estas tecnologías–, apoyará los proyectos piloto y costeará la adaptación logística de las infraestructuras portuarias.
El Componente 8 del PRTR se dedica a infraestructuras eléctricas, promoción de redes inteligentes y despliegue de la flexibilidad y el almacenamiento, elementos clave para conseguir un modelo energético descarbonizado, descentralizado, democratizado y digitalizado. El PERTE ERHA establece 620 millones de euros de apoyo.
Se subvencionarán iniciativas de I+D de almacenamiento de tecnologías inmaduras, incluyendo proyectos piloto comerciales y de investigación industrial. También se fomentarán nuevos modelos de negocio –como la agregación de demanda o la gestión inteligente de datos– y el despliegue de sistemas de almacenamiento, independientes o hibridados en instalaciones de renovables.
Junto con las medidas transformadoras, el PERTE ERHA contempla 17 medidas facilitadoras a las que contribuyen los ministerios de Industria, Comercio y Turismo; Asuntos Económicos y Transformación Digital; Educación y Formación Profesional, y Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, además del propio MITECO.
Son medidas de acompañamiento que generan un entorno propicio para la materialización del PERTE ERHA, como la formación y las mejoras en el ámbito laboral, el despliegue del autoconsumo en empresas que provoque efecto tractor sobre la cadena de valor de la tecnología o la movilidad con gases de origen renovable.
Para el desarrollo de estas medidas, se contempla una una dotación presupuestaria de 3.362 millones de euros. Asimismo, este PERTE reserva un papel relevante para el Instituto para la Diversificación y el Ahorro de la Energía (IDAE). Este organismo, dependiente del MITECO tomará participaciones en sociedades, UTEs, joint-ventures, y creará e impulsará instrumentos financieros, como fondos de inversión o préstamos participativos.