Los últimos cinco años han sido transformadores en el sector deportivo a nivel mundial. Las capacidades tecnológicas, los modelos de negocio de las ligas y equipos deportivos han sido impactados con cambios significativos.
A lo largo de este período, los atletas han tenido un impacto singular en el panorama deportivo en el que muchos han alcanzado el estatus de influencers.
Ahora comentan abiertamente sobre los problemas sociales y han cambiado la forma de conectar con sus fans, ahora pueden hacerlo directamente. También hemos visto que los propios aficionados al deporte han alcanzado una influencia notable en la forma en la que se consumen y monetizan los deportes, y a su vez, en cómo los deportes se integran en el amplio ecosistema de los medios de comunicación y el entretenimiento.
A medida que la industria mundial del deporte continúa navegando por este período de transformación masiva, nuestra perspectiva para 2024 explora cinco tendencias a las que se espera se enfrenten las organizaciones deportivas en este año.
Se espera que la economía del deporte siga siendo sólida en 2024. Sin embargo, es probable que el modelo comercial, que ha experimentado cambios significativos en los últimos años, continúe transformándose tanto en las fuentes de ingresos tradicionales como en las emergentes. Es probable que las áreas tradicionales como los patrocinios, la venta de entradas, las licencias y el merchandising continúen evolucionando en función de una mejor recopilación, análisis y uso de los datos de los fans. Las tendencias emergentes, tales como una variedad mayor de inversores y titulares de derechos de los medios de comunicación, la globalización, el crecimiento del deporte femenino y el surgimiento de nuevas empresas inmobiliarias, podrían brindar nuevas oportunidades.
La fortaleza del sector está respaldada por el hecho de que las valoraciones de los equipos continúan aumentando, tanto para el deporte masculino como para el femenino. La valoración de muchos equipos y ligas está anclada en lucrativos acuerdos de derechos de medios. En 2024, veremos cómo madura este mercado tan competitivo con el inicio de negociaciones oficiales para algunas de las principales ligas de fútbol de Europa y la NBA en Estados Unidos.
¿Qué pasa con las áreas de negocio deportivas emergentes? Este año, esperamos ver más interés y actividad derivadas de oportunidades relacionadas con la globalización, el deporte femenino y las instalaciones deportivas con distritos de usos múltiples.
Cuestiones estratégicas a tener en cuenta:
• A medida que la globalización se expanda, ¿cómo pueden los equipos, las ligas y las empresas de medios mantener el enfoque en apoyar a los aficionados locales?
• ¿Cómo pueden los equipos, las ligas y las empresas de medios mejorar la visibilidad y reducir las barreras de entrada para fortalecer a la próxima generación de aficionados?
• ¿Es sostenible el crecimiento de los derechos de los medios de comunicación? ¿Los recientes problemas del streaming se contagiarán a sus aspiraciones deportivas? Y si se llega a un punto crítico, ¿cuáles serían sus ramificaciones?
• ¿Cómo pueden los equipos, las ligas y las asociaciones seguir diversificando sus fuentes de ingresos y crear una cartera más equilibrada que no dependa tanto de los derechos de los medios de comunicación?
Recopilar información sobre los fans puede no ser suficiente. El primer paso es recopilar y agregar los datos de comportamiento e interacción de los fans, junto con datos relevantes de terceras y segundas partes, para crear una base de datos con un registro único y completo para cada aficionado. Usar los datos y monetizarlos es el segundo paso.
Las organizaciones deportivas pueden utilizar estos datos para dirigirse y llegar mejor a los aficionados, con mensajes de marketing personalizados, promociones y experiencias, todo ello con el objetivo de impulsar el engagement, la fidelidad y la compra. Además de impulsar la participación y el gasto de los fans, estas bases de datos exclusivas también podrían respaldar las fuentes de ingresos emergentes para las ligas y los equipos asegurando patrocinios más sólidos, derechos de denominación y acuerdos de derechos mediáticos.
Cuestiones estratégicas a tener en cuenta:
• ¿Con qué partners deberían colaborar las organizaciones deportivas para avanzar en su programas de datos de aficionados para satisfacer las necesidades del panorama deportivo en evolución?
• ¿Cuál es la estrategia de monetización de los datos de los fans y qué capacidades deben desarrollarse para impulsar esa estrategia?
• ¿Cómo pueden las ligas y los equipos trabajar responsablemente con proveedores de datos de segundas y terceras partes (e implementar acuerdos de intercambio) para construir bases de datos que creen perfiles completos de sus fans?
• ¿De qué manera pueden las ligas, las organizaciones y los grupos de propietarios de deportes utilizar las bases de datos de los fans para conectar, participar e interactuar con ellos, y cómo pueden tanto los aficionados leales como los ocasionales formar parte de su estrategia de divulgación?
La inteligencia artificial (IA) se ha utilizado en una variedad de casos de uso específicos del deporte durante varios años. En los recintos deportivos, se ha utilizado para mejorar la seguridad y proporcionar a los aficionados el pago sin contacto. Para atletas, entrenadores, preparadores físicos y árbitros, se ha utilizado para ayudar a mejorar el rendimiento, buscar talento, prevenir lesiones y hacer que el arbitraje sea más objetivo. Para los fans, la IA está personalizando su experiencia y creando un mejor producto para ver. Y para las operaciones de front-office, la inteligencia artificial está proporcionando información más profunda sobre el comportamiento de los aficionados, impulsando la venta de entradas con un mejor marketing y simplificando la contratación.
Al igual que el análisis de datos y el aprendizaje automático, es probable que la IA generativa impregne rápidamente muchos aspectos del deporte. En el transcurso de los próximos 12 a 18 meses, esperamos ver una oleada de aplicaciones innovadoras que involucren la generación y administración de contenido, la cobertura deportiva en vivo, la evaluación de jugadores, las apuestas deportivas, la participación de los fanáticos y las operaciones administrativas. Para los fanáticos, las herramientas y aplicaciones de IA generativa se pueden usar para crear videos personalizados y momentos destacados de sus equipos y jugadores favoritos, brindarles promociones basadas en sus comportamientos e intereses, potenciar chatbots y avatares digitales para ayudarles a interactuar con el contenido del juego de una nueva manera.
Aunque existe mucha presión del mercado para adoptar herramientas y aplicaciones de IA generativa rápidamente, apresurar el proceso de adopción puede crear problemas. Los equipos, las ligas y las organizaciones deben buscar formas de abordar sus necesidades a corto y largo plazo, no solo en la estrategia y la infraestructura tecnológica, sino también en torno a la gestión de riesgos, la gobernanza y el talento.
Cuestiones estratégicas a tener en cuenta:
• Con la tecnología y la adopción avanzando rápidamente, ¿cómo pueden las organizaciones deportivas mantenerse al tanto de los cambios, experimentar rápidamente y escalar?
• ¿Cómo pueden las capacidades de IA generativa basarse en las capacidades existentes de IA y datos para equipos, ligas y organizaciones? ¿Cómo necesitarán mejorar su infraestructura informática y sus plataformas de datos para utilizar eficazmente la IA generativa?
• ¿Cómo pueden las organizaciones aprovechar mejor sus datos exclusivos en combinación con los crecientes y grandes modelos de lenguaje comoditizados para mejorar y crear nuevas fuentes de ingresos?
• ¿Qué estrategias de mitigación de riesgos deberán crear las organizaciones para manejar la incertidumbre y las consecuencias imprevistas en torno la IA generativa, tales como la confianza en los resultados, los problemas de propiedad intelectual y las múltiples regulaciones?
Los megaeventos, como los Juegos Olímpicos, la Copa Mundial de la FIFA, la Copa Mundial de Cricket ICC y la Copa Mundial de Rugby parecen estar en una intersección. Por un lado, el mundo debería tener eventos que unan a las personas en la solidaridad global y el juego limpio. Por otro lado, la complejidad y el costo de estos eventos pueden estar llegando a un punto crítico.
Para que los megaeventos sigan siendo viables en el futuro, los organizadores y los países anfitriones deben encontrar formas de equilibrar el costo y la complejidad que implica organizar dichos eventos con elementos de legado duradero y comunidad, brindando experiencias memorables y aumentando la participación de los espectadores asistentes, así como para aquellos aficionados que sigan el megaevento desde casa. Aunque estos objetivos parecen estar en desacuerdo, la integración de la tecnología y la digitalización pueden ser la clave para lograr que ambos se logren al mismo tiempo.
Los Juegos Olímpicos de París 2024 buscan ofrecer calidad, al tiempo que gestionan los costes y equilibran la complejidad. Si tienen éxito, los Juegos de París pueden ser un punto de prueba para la "Agenda Olímpica 2020" del Comité Olímpico Internacional y pueden ilustrar un nuevo modelo para el futuro, a la vez que los posibles países anfitriones y comités organizadores de todo el mundo estarán observando.
Cuestiones estratégicas a tener en cuenta:
• ¿Cómo pueden los organizadores de megaeventos continuar brindando experiencias memorables, potentes y unificadoras mientras operan a costes más bajos? ¿Qué compensaciones se pueden hacer entre el coste y la experiencia?
• ¿Qué tecnología pueden utilizar los organizadores de megaeventos para hacer que los juegos sean más accesibles, inclusivos, sostenibles, seguros y emocionantes para los atletas, los asistentes y los espectadores en casa? ¿Cómo se puede utilizar la IA para maximizar estos efectos?
• ¿Cómo se pueden recopilar y reutilizar los datos para acortar la curva de aprendizaje de los megaeventos para las ciudades anfitrionas y sus equipos, y cómo se pueden aprovechar las soluciones prediseñadas y construidas para ofrecer un "evento enlatado"?
• Con más datos, más fans y experiencias más inmersivas, viene el mandato de proteger estos datos y defender el pacto de confianza. ¿Cómo pueden tanto los anfitriones de eventos como las ciudades infundir y elevar la ciberseguridad sin aumentar los costos e inhibir la experiencia sin fricciones?
• ¿Cómo se pueden desarrollar estrategias deliberadas en torno al "legado" de los megaeventos para apoyar la infraestructura cívica, el desarrollo comunitario y la construcción de comunidades más inclusivas?
Desde el anuncio de innumerables cambios a varios acuerdos de Nombre, Imagen y Recomendación, en inglés, Name, Image y Likeness, (NIL), los últimos años en el atletismo universitario estadounidense han estado llenos de cambios. ¿Será 2024 el año en que comencemos a ver una "nueva normalidad" establecida para estas organizaciones, los atletas y la Asociación Nacional Atlética Universitaria, (NCAA por sus siglas en inglés)? ¿O hay más disrupción en camino?
Para empezar, algunos movimientos importantes entrarán en vigor en 2024. Muchos de estos movimientos tenían como objetivo asegurar mejores acuerdos con los medios, maximizar los ingresos o asegurar ventajas competitivas, en gran parte para los equipos de fútbol americano y, a veces, de baloncesto de las escuelas. Estas nuevas estructuras de conferencias pueden tener sentido comercial para algunos programas, pero hay una creciente preocupación por el bienestar de los estudiantes-atletas bajo la nueva estructura y la "profesionalización" percibida del atletismo universitario.
Otro tema crítico en los deportes universitarios estadounidenses es la política NIL, que permite que los estudiantes-atletas que participan a nivel universitario se beneficien de su nombre, imagen y recomendación. La política ha estado vigente desde 2021, pero tanto la NCAA como el Congreso de EE. UU. han abordado la posibilidad de agregar más barreras a las políticas actuales.
Las viejas formas de hacer negocios y operar los departamentos deportivos ya estaban a tensas, y si bien el nuevo conjunto de reglas y regulaciones puede crear cierta estabilidad, también podrían estirar aún más a estas organizaciones. Es probable que las instituciones tengan que reevaluar todo, desde los modelos operativos hasta los modelos comerciales, para asegurarse de que prosperan en la "nueva normalidad" y aprovechen las oportunidades emergentes.
Cuestiones estratégicas a tener en cuenta:
• ¿Cómo pueden los órganos de gobierno crear e implementar con éxito reglas y regulaciones que logren un equilibrio saludable entre las ganancias en el atletismo universitario y el bienestar de los estudiantes-atletas?
• ¿Qué protecciones pueden implementarse, ya sea por parte de la NCAA, el Congreso Estadounidense o las instituciones de educación superior, que beneficien a los estudiantes-atletas a largo plazo y mantengan la integridad y longevidad del atletismo universitario en el futuro?
• ¿Cómo impactarán los cambios en el atletismo universitario en la industria del deporte profesional, desde el flujo de atletas hasta sus expectativas de compensación y patrocinio?
• ¿Cómo pueden los organismos reguladores equilibrar la tradición del atletismo universitario con los intereses financieros de los programas de conferencias de poder y el bienestar de los estudiantes-atletas?
Para obtener más información sobre el impacto de estas tendencias en el sector, accede al informe completo.