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El poder de la integridad: ganándose la confianza de los clientes desde 1845

La reputación de Deloitte en contabilidad y auditoría se basa en la confianza que se ha ganado con los clientes y el público en general. Esa ética de integridad impregna todos los servicios prestados por Deloitte.

En 1856, William Welch Deloitte obtuvo el que posiblemente fuera el encargo más importante de su carrera: investigar un importante fraude en el Great Northern Railway (GNR). Sólo seis meses después, sería despedido. Perder una cuenta tan importante de forma tan pública podría haber paralizado a otra empresa. Pero para Deloitte, puso de relieve su compromiso con la correcta realización de las auditorías.

La cuestión era el dinero: no el dinero robado a los accionistas de la GNR por Leopold Redpath, sino el dinero necesario para desentrañarlo. GNR insistió en que la investigación de Deloitte se llevara a cabo de forma rápida y barata. Deloitte, en efecto, dijo al cliente que podía tener una cosa o la otra, pero no ambas. Al hacerlo, aseguró a sus otros clientes y a sus accionistas que se podía confiar en su palabra. Era lo más importante que se podía decir de un auditor.

El mismo principio, que la reputación de uno era más importante que mantener un cliente, se mantenía en Haskins & Sells. A principios del siglo XX, un equipo de auditoría de Haskins & Sells descubrió que un cliente estaba inflando incorrectamente sus saldos de efectivo. El cliente se opuso a la señal de alerta de los auditores, pero Haskins & Sells fue contundente: "Más allá de la máxima vigilancia, la otra forma más segura de proteger nuestro nombre y buena voluntad sería disolver las relaciones".

En todo el mundo, Deloitte y sus empresas predecesoras han desempeñado un papel decisivo en el establecimiento de las normas que salvaguardan la fiabilidad de la profesión. Los socios de Deloitte han establecido y dirigido organizaciones profesionales nacionales que supervisan la educación y la conducta ética. Pero la práctica de auditoría de Deloitte no es la única área de su negocio basada en la confianza. La integridad y objetividad que definen su práctica de auditoría han tenido un impacto positivo en otros negocios de Deloitte.

La empresa predecesora de Deloitte en Noruega, el Bergens Revisionsinstitut, se autodenominaba "tillitsselskapet", "la empresa de la confianza".