En los últimos años, las energías renovables y su relación con la acción climática han experimentado un notable auge a nivel global, posicionando diferentes agendas y oportunidades de negocio en torno a la transición energética. Según Morningstar, al 2023 los fondos de inversión en el mundo, enfocados en soluciones climáticas y de transición energética, ascendieron a 128.000 millones de dólares de activos, cerca del 40% del PIB peruano.
Entre 2010 y 2023, según la Agencia Internacional de Energía (IEA), la capacidad mundial de energía solar fotovoltaica se multiplicó por 40, mientras que la capacidad de energía eólica se sextuplicó. Además, en 2023 se alcanzó un récord en la incorporación de energías renovables al sector eléctrico, representando el 86 % de las nuevas adiciones de capacidad instalada a nivel global y logrando una capacidad total de 3870 gigavatios (GW), de acuerdo con la Agencia Internacional de Energías Renovables (IRENA).
Estos son algunos de los temas abordados en el artículo “Perú en la transición energética”, elaborado por Dafna Siegert, el cual fue publicado en Stakeholders, en el que se destaca, que Perú se ha comprometido a reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero en un 40% y a alcanzar un 20% de producción de energía renovable no convencional para 2030. A pesar de ser avances relevantes, no se han comprometido montos específi cos en el presupuesto público para el logro de estas metas.