Perú se consolida como una de las economías más atractivas de América Latina para la inversión extranjera, gracias a su estabilidad macroeconómica, apertura comercial y marco legal favorable. Con un crecimiento proyectado del 3.7% para 2025 y una inflación controlada, el país ofrece condiciones propicias para el desarrollo de negocios en sectores estratégicos como minería, agroindustria, telecomunicaciones y servicios financieros.
La Inversión Extranjera Directa (IED) ha mostrado una tendencia positiva, con Reino Unido, España, Chile y Estados Unidos como principales países de origen. El sector minero lidera la recepción de capitales, seguido por finanzas y comunicaciones. Además, Perú cuenta con 22 tratados comerciales vigentes que facilitan el acceso a mercados internacionales, incluyendo China, Estados Unidos y la Unión Europea.
El marco jurídico peruano permite diversas formas de organización empresarial, desde sociedades anónimas hasta sucursales de empresas extranjeras, con procesos simplificados para su constitución. Asimismo, se promueve la transparencia y el cumplimiento normativo mediante leyes de protección de datos, prevención de lavado de activos y programas de compliance corporativo.
En materia fiscal, Perú ofrece un régimen competitivo con una tasa corporativa del 29.5% y beneficios específicos para sectores como el agrario, la Amazonía y el turismo. La legislación está alineada con estándares internacionales, incluyendo tratados para evitar la doble tributación y normas de precios de transferencia basadas en el modelo OCDE.
¿Deseas conocer más sobre cómo hacer negocios en Perú?
Consulta el documento completo Doing Business Perú 2025 elaborado por Deloitte, donde encontrará información detallada sobre el entorno económico, legal y tributario del país.