Las empresas deben ser conscientes de su impacto en la economía, el medio ambiente y la sociedad y tomar medidas para mejorar su contribución al desarrollo sostenible. En este sentido, la evaluación de la doble materialidad en la gestión de la sostenibilidad es un concepto fundamental que todas las empresas deben conocer e implementar.
En este artículo de Eduardo Atehortua, socio de Sostenibilidad y Cambio Climático para la Región Andina de Deloitte Spanish Latin America, publicado en la Revista 360, se explica cómo este ejercicio permite identificar los temas que tienen un impacto significativo en la empresa, a la vez que facilita la comprensión de los riesgos y las oportunidades de sostenibilidad que afectan a la compañía a corto y a largo plazo.
Entre los aportes más significativos de la doble materialidad se encuentran evaluar qué tipo de impacto financiero pueden tener los riesgos de transición relacionados con el clima, los riesgos físicos y las oportunidades en el estado de resultados, el estado de flujo de efectivo y el balance general de una empresa.
Sin duda, este concepto es un paso importante para que las empresas puedan integrar la sostenibilidad en su gestión de riesgos y mejorar su contribución al desarrollo sostenible. Explore este artículo y conozca cómo las empresas pueden implementar este concepto para enfrentar los desafíos actuales y futuros de manera responsable y sostenible.