El cáncer cervicouterino (CaCu) es una grave preocupación de salud pública a nivel global, con una mujer falleciendo cada dos minutos debido a esta enfermedad prevenible, según Tedros Adhanom, Director General de la OMS. Entre 2018 y 2030, se proyecta un aumento en los nuevos casos de CaCu de 570,000 a 700,000 anuales, y las muertes de 311,000 a 400,000 anuales. El 85% de las mujeres afectadas son jóvenes con escasa educación, viviendo en países pobres, lo que agrava la situación.
En Latinoamérica, el cáncer es una creciente preocupación debido a la limitada capacidad de atención de los sistemas de salud y factores como el envejecimiento poblacional, urbanización, y estilos de vida poco saludables. La región presenta la segunda tasa más alta de mortalidad por CaCu después de África. En México, el CaCu es la segunda causa de muerte por cáncer en mujeres, con una incidencia de 12.6 casos y una tasa de mortalidad de 7.3 por cada 100,000 habitantes. La cobertura de pruebas de cribado es baja, especialmente en áreas rurales y entre mujeres de bajos recursos.
El Virus del Papiloma Humano (VPH) es la principal causa del CaCu y se transmite por contacto sexual. La vacunación contra el VPH y el tamizaje temprano son estrategias clave para prevenir esta enfermedad. Sin embargo, en México la cobertura de cribado es baja, alcanzando solo el 10.9% de la población objetivo en 2022.
Deloitte ha desarrollado un análisis comparativo de la carga económica y sociosanitaria del CaCu en México, destacando que aumentar la cobertura de cribado al 70% podría reducir la incidencia de la enfermedad en un 80% y generar un ahorro total de 424,087 millones de pesos en el tratamiento de CaCu. La implementación de pruebas de VPH con dispositivos de autotoma y genotipado extendido es la opción más costo-eficiente para aumentar la cobertura y reducir la mortalidad.
En países como Canadá y Nueva Zelanda, Deloitte ha implementado soluciones de cribado de cáncer que han mejorado significativamente la detección temprana, participación en los programas de cribado, y educación sobre la importancia de la prevención.
Es urgente actualizar los métodos de cribado en México, adoptando tecnologías y estrategias que permitan alcanzar la meta de 70% de cobertura y reducir la carga económica y social del CaCu. La prueba de ADN del VPH, especialmente mediante autotoma, es la opción más costo-eficiente y eficaz para la detección de lesiones precancerosas del cuello uterino.
Para conocer más a detalle el análisis costo-eficiente respecto al VPH y CaCu, te invitamos a seguir el siguiente enlace.