Análisis
La Cultura del Ahorro en Chile: Desafío en los Bancos
Para profundizar sobre la cultura de ahorro de las personas en Chile en un contexto global de inseguridad financiera, Deloitte Chile realizó una encuesta orientada a caracterizar los comportamientos y actitudes de ahorro de los consumidores locales.
Preguntas Clave:
- ¿La pandemia de COVID-19 ha cambiado las perspectivas de las personas sobre el ahorro?
- ¿Las instituciones financieras están en el camino correcto en poder educar financieramente a sus clientes?
- ¿Por qué algunos chilenos no ahorran en las entidades financieras?
La intención de este estudio es aportar a las estrategias, tanto públicas como privadas, que buscan mejorar la cultura de ahorro en el país. Entendiendo la realidad chilena en el contexto actual, nos hemos centrado en el comportamiento de ahorro de las personas, motivaciones y expectativas asociadas.
La compleja situación económica por la que pasa el país constituye un marco relevante para interpretar los resultados de la encuesta. En efecto, las familias chilenas han realizado ajustes significativos para hacer frente a las condiciones actuales.
Presentamos algunos datos relevantes del estudio Retirement & Saving Survey dentro del mundo y la encuesta realizada en Chile:
Motivos por los ahorros según el estudio Deloitte Retirement & Saving survey
Los ahorradores en el mundo post-pandémico están ansiosos por su futuro financiero. Han visto que una crisis inesperada puede poner desestabilizar sus finanzas y sus vidas junto con ella. La industria de servicios financieros tiene un papel que desempeñar para ayudar a los ahorradores a prepararse en caso de que una crisis similar vuelva a golpear.
Desafíos de la Industria Financiera
Tomar la delantera y conocer a sus clientes: Es fundamental conocer el valor emocional que se le da a los ahorros, los clientes tienen expectativas y motivaciones de diferente naturaleza.
Diseñar ofertas atractivas de productos de ahorro:
Los datos indican que los chilenos demandan productos simples y funcionales, el desafío por lo tanto es flexibilizar tales instrumentos, mejorar los servicios específicos para cada meta de ahorro, y disponibilizar su acceso a través de todos los canales.
Incentivar el ahorro a través de la educación financiera:
Esto supone el reto de la industria bancaria de cómo acompañarlos. El fortalecimiento de la educación financiera promueve la responsabilidad en el manejo de los recursos, incluso de quienes de momento aún no tienen capacidad de ahorrar. El desafío es considerar la educación financiera como agente disruptivo en las decisiones de los clientes.
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